Estuvimos del 4 al 5 de junio de este año. Hemos estado solo un día y nos resultó muy útil. Tanto el pueblo como el hotel fue una grata sorpresa. Hotel fácil de llegar, tiene parking propio y gratuito, la habitación cómoda. El desayuno servido en bandeja en la mesa bastante abundante. El hotel está atendido por sus dueños siendo muy amables y cordiales.

La habitación estaba muy bonita, todo muy limpio, moderno, etc El WiFi es casi inexistente, muy débil. Y el aire acondicionado que me dijeron que es automático y que no me preocupe que aunque me parece que hace calor al entrar, después estará fresquito, no hubo gran cambio. Al entrar en la habitación había 30°,en una hora y media antes de dormir había bajado a 27,5° y luego por la mañana eran como 25°, eso que lo mire y estaba puesto en 22°. Sinceramente, lo considero inaceptable. Y lo mejor de la estancia es desde luego la charla que te dan al llegar con un montón de normas como en una escuela. Nunca visto ni oído hasta ahora y eso que no paro de viajar. No volveré por desgracia

Experiencia horrible. Recepcionistas con una falta de respeto por sernos turistas y además no he podido llevar ningún acompañante incluso mi hermana. Además, la señora me insultó en catalán y pensaba que no hablaba el catalán.

Buena relación calidad precio. Muy buen trato!

Un lugar perfecto tanto para cualquier tipo de comida, desde desayuno a cena, porque aparte de muy buena atención recibes muy buena calidad