Hemos estado dos veces ya en dos veranos seguidos. Es una lástima que la persona que está al cargo sea tan desagradable. El sitio para ser un dos estrellas no está mal. Lo mejor la habitación. El ascensor no llega a recepción. El parking los dos veranos que hemos estado en obras , en otro edificio que se comunica y este año nos pusieron en coche echo una muerda. Les sentó mal que se lo dijéramos. Si que es cierto que de los 36€ nos devolvieron 5€ para lavarlo. Con sólo un mejor trato nos abrimos conformado. No vol esos más.

Mucho calor en la habitación y se escuchan mucho los ruidos del interior del hotel El ascensor no llega hasta la entrada, hay que atravesar todo el comedor o bajarse en la primera planta El coche en el garaje del hotel, previo pago, y lo mancharon todo de salpicaduras (había obras) Al decirles con mucha soberbia y malas maneras me dice que ya me da 5€ para que lo meta en un túnel de lavado de una gasolinera, ni una triste disculpa. Increíble. Para rematar cobran toda la estancia a la llegada con la excusa de agilizar la salida. Desayuno con escasa variedad Lo único bueno la ubicación porque precio caro para lo que se recibe

Hotel a orillas de la Playa de Trengandín (Noja). Las camas son cómodas, aunque la almohada demasiado fina. Las paredes son finas y se escuchan todos los ruidos. El desayuno está muy bien y en la cena (cogimos media pensión) te dan dos opciones de primeros y segundos y mayor variedad de postres. Buena relación calidad-precio.

Estuvimos la semana pasada. Fuimos dos parejas. La limpieza muy escasa. Uno de los baños olía a alcantarilla todo el rato, insoportable el olor y la única solución k nos dieron era k cerráramos la puerta. Y una de las chicas de recepción un poco borde cuando le comentamos lo k pasaba con el olor de la habitación.

Hemos comido una mariscada de bogavante para dos personas y además de buenísima muy abundante y variada. Los postres exquisitos, me habían aconsejado la torrija y la verdad acerté. El trato ha sido excelente y rápido. Sin duda repetiremos.