Lamentablemente, sólo estaré en San Sebastian esta semana. Habrá que esperar a otra ocasión.

Es un buen restaurante para el menú de medio día, porque sino resulta demasiado caro. La comida no estaba mal. Nos sirvieron de aperitivo una ensaladilla de bonito, después de primero pastel de espárragos con langostinos que estaba rico y arroz con chipirones que no me acabó de gustar. De segundo chipirones encebollados que estaban tiernos y sabrosos y marmitako de bonito que estaba muy bueno y en su punto. De postre mousse de chocolate con helado de galleta, que sabía mucho mejor que el aspecto que tenía. Y soufflé de piña y chocolate que solo sabía a piña.

Comimos unos judías verdes con foie riquisimas!! El cocinero hasta vino a ver que tal estaba todo. Volveremos seguro.

Pues a mí me debieron pillar en su peor día. Todo tremendamente lento. Eterna la espera para que te tomen nota, Nos sirvieron el primero sin haber puesto la bebida. Media hora para el segundo y la calidad… Las cocotxas estaban recalentadas y, sinceramente, las he comido muchísimo mejores en otros locales de la zona. Por lo que a mí respecta muy mal.

Un poco carillo, pero merece la pena. Muy muy buena comida, servicio y decoracion acogedora