Un lugar maravilloso: tiene una playa con fina y agradable arena, agua turquesa, que se queda en tu menta hasta la próxima visita. Te has cansado de la playa - tienes una ciudad antigua para descubrir: castillo precioso, bien guardado y atractivo para cualquier edad, pequeñas tiendas que parecen de juguetes, te puedes perderse en estas estrechas calles y siempre te escuchas el susurro del mar que esta a los pies de esta preciosa ciudad. La amabilidad de la gente asombra. Y si quieres comprar algo de recuerdo o unas sandalias nuevas aquí tienes un montón de tiendas para todos los gustos. Y unas palabras especiales a la gastronomía de esta ciudad: aquí se come en cualquier sitio de maravilla, todo recién hecho, recién cortado, pescado y marisco fresco. Y todo esto sentado en las calles de piedra de este precioso castillo y disfrutando de este sitio que tiene siglos!

Lo mejor es ir al anochecer y las vistas te enamorada.

Castillo para visitar sin falta si pasas por peñiscola.

Vale la pena verlo, la entrada no es muy cara (5€)

Lugar especial. Vistas increibles. Muchas tiendas de artesania. Vale la pena