marcello metitieri 10/05/2022 Uno de los pocos edificios religiosos barrocos de Valladolid, destacando su fachada dieciochesca de 1730. Restaurada en 2014, actualmente es el centro neocatumenal diocesano. Una pena su encajonamiento urbanístico que no la permite mostrar toda su belleza. Junto al Museo Oriental y frente al Campo Grande resulta curiosa su visita, en un entorno agradable para pasear sin prisas.
angel suarez 14/01/2020 Una iglesia que puede pasar desapercibida por su colocacion y situacion ahora encajonada entre dos edificios pero que bien merece la pena una detenida observacion a su fachada y a su interior. Uno de los mas claros y representativos ejemplos del arte barroco de la ciudad de Valladolid. Hubo un primer edificio que constaba de una iglesia y un asilo para albergar a trece ancianos pobres y enfermos sin medios, en recuerdo de Cristo y sus doce apóstoles y con el paso del tiempo el emperador Carlos V aceptó el patronazgo de la Corona, motivo por el cual las armas reales aparecen en la fachada. En 1641 la ruinosa y primitiva iglesia, sufrió un hundimiento importante, y en 1675 Juan de Naveda y Antonio del Solar se comprometieron a construir un templo nuevo, el actual, segun la planta y trazas de Juan Tejedor Lozano. Las obras debieron de paralizarse bastante tiempo y tiempo despues en el año 1729 recibieron un nuevo impulso, ocupándose de las obras Matías Machuca que se comprometió el 30 de junio de 1732 a “proseguir, hacer y fabricar la obra de la iglesia hasta cerrarla y coger las aguas”. El edificio se inauguró finalmente el 10 de septiembre de 1739.