Restaurante histórico de Granada. Dos generaciones al frente y siguen con la misma calidad y buen servicio de siempre. Tienen menú para celiacos. Carnes, pescados y mariscos frescos y muy bien cocinados. Local muy bien ambientado para sentirte cómodo.

Hoy he visitado este restaurante por primera vez con dos amigos. Quiero comenzar resaltando el trato exquisito del camarero que nos ha atendido. El ambiente del local me ha gustado... Todo iba bien hasta que cuando nos han servido los platos que hemos pedido iba incluida en uno de ellos una visitante viva muy desagradable... He llamado a uno de los camareros y se lo he comentado discretamente....se ha ofrecido instantáneamente a retirar todos los platos y bebidas y servirnos nuevamente, pero ya no nos ha apetecido comer allí, obviamente.

El servicio excepcional pero como es un restaurante caro todo tiene que estar perfecto para llegar al 5...el producto fue irregular algunos platos perfectos pero otros tenían menos nivel y para su precio todo debería estar bien. El magnífico servicio hace que suba la nota

Viven más del nombre que de otra cosa. Carta muy limitada. Precios altos. El servicio deja mucho que desear. En concreto, la comida, aunque buena, nos llegó fría. Vasos sucios, nos faltaron cubiertos, tardaron bastante hasta para la cuenta... para colmo, alguna insolencia de los camareros puso el broche para no volver nunca. Justo al lado hay dos o tres restaurantes similares que están mucho mejor.

La comida exquisita y con materia prima de primera calidad. El servicio es atento y muy profesional. Tienen bodega propia con selección de vinos de varios tipos, nos gustó mucho el rosado que nos ofrecieron. 100% recomendable